Aplicamos una protección adecuada contra la corrosión a las superficies metálicas y asi poder conservar los recursos de nuestros clientes.
Los metales, cuando están expuestos a las inclemencias del tiempo, especialmente en zonas de mucha humedad, sufren la alteración de sus propiedades, el clima los degrada si están sin cobertura, lo que provoca cambios no solo en su apariencia, sino también en su capacidad de resistencia.